No lo utilices si tienes menos de 18 años.
No lo utilices si actualmente tienes o tienes antecedentes de cáncer, especialmente cáncer de piel o lunares premalignos.
No lo utilices si estás embarazada o amamantando.
No lo utilices si tienes rellenos permanentes en la zona de tratamiento. Si tienes rellenos dérmicos temporales, te recomendamos consultar a un médico.
No lo utilices si tienes un marcapasos o desfibrilador interno.
No lo utilices si tienes implantes metálicos en la zona de tratamiento. Esto no incluye empastes dentales.
No lo utilices si tienes afecciones cardiacas graves concurrentes.
No lo utilices si tienes un sistema inmunológico comprometido debido a medicamentos inmunosupresores o enfermedades inmunosupresoras como el SIDA.
No lo utilices si tienes alguna enfermedad que se estimule con el calor, como (pero no limitado a) herpes simple recurrente dentro de la zona de tratamiento.
No lo utilices si tienes alguna afección cutánea activa en la zona de tratamiento, incluyendo, pero no limitado a, llagas, psoriasis, eczema o erupciones cutáneas.
No lo utilices si tienes antecedentes de cicatrices queloides, cicatrización anormal de heridas o piel frágil.
No recomendamos el uso de nuestros dispositivos si has tenido algún procedimiento quirúrgico, resurfacing láser o peeling químico profundo en el área de tratamiento en los últimos tres meses o si aún estás en proceso de curación.
No lo utilices si tienes lesiones sospechosas en el área de tratamiento.
No lo utilices si actualmente utilizas medicamentos, preparados a base de hierbas, vitaminas o suplementos alimenticios que puedan provocar piel frágil o seca.
No lo utilices si tienes diabetes.
No lo utilices si has tenido un accidente cerebrovascular en el pasado. Si no estás seguro, siempre recomendamos hablar con tu médico para obtener más consejos antes de comenzar un tratamiento.