CÓMO USAR
Paso 1: Limpia tu cara y sécala. Aplica tu suero o humectante favorito para ayudar a que los masajeadores de hielo se deslicen suavemente.
Paso 2: Empieza por las cejas, pasando el lado más plano de las varillas a lo largo de la ceja hasta la sien. Luego, sostén la varilla sobre la cuenca del ojo antes de moverla por debajo. Usa movimientos amplios hacia afuera las sienes para ayudar a drenar las toxinas.
Paso 3: Desde la mitad de la cara, muévelos de los pómulos hasta la parte superior de la oreja.
Paso 4: Muévelos hacia tu frente, moviendo los masajeadores hacia afuera horizontalmente. Sostenlos en la línea del cabello y luego trabaja con un movimiento hacia arriba desde la frente, levantándolos suavemente a medida que avanzas.
Paso 5: Con un movimiento hacia arriba, trabaja el cuello enfocándote en el área debajo del mentón.
Paso 6: No olvides lavar tus masajeadores con agua y secarlos con una toalla.
Consejos importantes: Guárdelos en el refrigerador o congelador y retírelos 5 minutos antes de usarlos. Sostenlos en la parte posterior de tu cuello y detrás de tus orejas para disfrutar de una mejor experiencia. Para una tonificación adicional, usa los accesorios en tu escote.